El hongo que causa la sarna de la manzana en el manzano y en el manzano silvestre es el Venturia inaequalis. Hay hongos relacionados que causan la sarna en otras plantas de la familia de las rosas.
Los síntomas, generalmente, comienzan a verse en el envés de las hojas. Las manchas, al principio, son lesiones pequeñas irregulares de color marrón claro a verde oliva. A medida que la infección avanza, las lesiones se redondean y se tornan de color verde oliva aterciopelado. Más tarde, las manchas se tornan de color marrón oscuro a negro. El tejido infectado se engrosa y, entonces, la parte superior se abulta y la parte inferior se hunde. El margen de la hoja se riza y se chamusca. Si los pecíolos se infectan, las hojas se caen antes de tiempo. Si los pedicelos se infectan, los frutos se caen antes de tiempo.
La sarna de la manzana se manifiesta en el fruto como lesiones casi circulares de color verde oscuro. La cáscara de la manzana cerca del margen de la zona infectada se quiebra. Las lesiones más viejas son negras, costrosas y agrietadas.
Las infecciones ocurren en condiciones húmedas (lluvia, rocío o riego constante). La temperatura afecta la gravedad de las infecciones. Para que las infecciones se manifiesten cuando hace mucho frío, las plantas deben mantenerse húmedas durante bastante más tiempo que cuando hace calor.
Mantenga las plantas vigorosas. Evite exponer a los manzanos y a los manzanos silvestres a condiciones de estrés. Las buenas prácticas sanitarias son esenciales. Retire y destruya las hojas, las flores y los frutos infectados lo antes posible. Cultive variedades resistentes siempre que sea posible.
Si fuera necesario, aplique los fungicidas recomendados siguiendo las recomendaciones del envase.
La batalla contra la sarna de la manzana se gana o se pierde desde fines de abril hasta principios de junio (desde que se abre la yema hasta que se forma el fruto). Ese es el momento en que aparece la sarna. Por lo tanto, para controlar la enfermedad por completo hay que aplicar fungicidas regularmente a los manzanos y a los manzanos silvestres.
En épocas de mucha lluvia y humedad realice las aplicaciones según las instrucciones del envase. Cubra por completo y de manera uniforme todas las hojas y los frutos en desarrollo. La mayoría de los fungicidas se usan para prevenir las infecciones. Utilice una rociadora comercial para cubrir por completo el follaje con el fungicida.
Una vez que las hojas comienzan a tornarse amarillas y se caen, ya es demasiado tarde para fumigar durante esa estación de crecimiento.