University of Illinois Extension

Historia de las Calabazas

Desde hace ya varios siglos se ha hecho referencia a las calabazas. El término pumpkin, calabaza en inglés, proviene de la palabra griega pepon que describe a un melón grande. Los franceses nasalizaron el término pepon y lo convirtieron en pompon. Los ingleses convirtieron a pompon en pumpion. Shakespeare hizo referencia al pumpion en su obra Las alegres comadres de Windsor. Los colonos americanos convirtieron a pumpion en pumpkin. Se hace referencia a pumpkin en Sleepy Hollow, la leyenda del jinete sin cabeza, en Peter, Peter, Pumpkin Eater y en Cenicienta.

Los nativos americanos secaban tiras de calabazas y las tejían para hacer esteras. También asaban a fuego abierto tiras largas de calabazas y se las comían. El pastel de calabaza nació cuando los colonos cortaron la parte superior de la calabaza, le sacaron las semillas y la rellenaron con leche, especias y miel. Después la calabaza se cocinaba en cenizas calientes.

La Historia de la Jack-o-Lantern

Las Jack-o-Lanterns existen en Halloween desde hace ya varios siglos. La práctica de hacerlas tiene su origen en un mito irlandés acerca de un hombre apodado Stingy Jack (TN: El término del inglés stingy significa en español mísero, tacaño). Según cuenta la historia, Stingy Jack invitó al diablo a tomar un trago con él. Haciéndole honor a su nombre, Stingy Jack no quiso pagar por su trago y convenció al diablo para que se convirtiera en una moneda para pagar por sus bebidas. Una vez que el diablo cumplió con su deseo, Jack decidió quedarse con el dinero y lo puso en su bolsillo al lado de una cruz de plata para impedir que el diablo volviera a tomar su forma original. Después de un tiempo, Jack liberó al diablo y puso como condición que no lo molestaría durante un año y que, en caso de que Jack muriera, no reclamaría su alma. Al año siguiente, Jack volvió a engañar al diablo cuando le pidió que se subiera a un árbol a buscar un fruto. Mientras el diablo estaba arriba del árbol Jack marcó el signo de la cruz en la corteza para que el diablo no pudiera bajar hasta prometerle a Jack que no lo iba a molestar durante diez años más.

Al poco tiempo, Jack murió. Como dice la leyenda, Dios no iba a permitir una figura tan deshonrosa en el paraíso. El diablo, molesto por la trampa de Jack y sin romper su promesa de no reclamar su alma, no dejó que Jack entrara en el infierno. Echó a Jack en la noche oscura con sólo un carbón encendido para iluminar su rumbo. Jack puso el carbón en un nabo ahuecado y ha estado dando vueltas en la tierra desde ese entonces. Los irlandeses comenzaron a referirse a esta figura fantasmagórica como "Jack of the Lantern" y luego, simplemente, "Jack O'Lantern."

En Irlanda y Escocia la gente comenzó a crear sus propias versiones de las linternas de Jack tallando caras tenebrosas en nabos o papas ahuecados que colocaban cerca de las ventanas o puertas para ahuyentar a Stingy Jack y a otros espíritus malignos. En Inglaterra se utilizan remolachas grandes. Los inmigrantes que provenían de estos países trajeron consigo a los Estados Unidos la tradición de las linternas Jack o'Lanterns. Pronto descubrieron que las calabazas, un fruto originario de América, era ideal para hacer estas linternas.

Fuente: The History Channel