Los científicos desarrollaron un índice para indicar cuando las combinaciones de temperaturas bajas y los vientos pueden tornarse peligrosas para los seres humanos.
La sensación térmica por debajo de los -18° F es muy peligrosa porque en estas circunstancias la piel se congela en 30 minutos o menos.
La temperatura de -5° F con vientos de 30 millas por hora produce una sensación térmica de -32° F. Con esta sensación térmica la piel se congela en 10 minutos.