Pueden vivir cómodamente en la ciudad o en el campo siempre y cuando hagan ejercicio a diario. Necesitan hacer caminatas rápidas todos los días. Requieren mucho espacio. No pueden quedarse solos durante demasiado tiempo porque se aburren y se tornan destructivos. Deben recibir entrenamiento para obedecer desde muy temprana edad. Hay que bañarlos y cepillarlos de vez en cuando para mantener el manto en buenas condiciones.
Son calmos, amigables y tiernos con los niños. Suelen ser tímidos ante extraños. La mayoría son buenos guardianes.
28 a 32 pulgadas de alto
100 a 130 libras
6 a 8 años
Alemania – El gran danés se desarrolló para cazar jabalíes salvajes.